Presencia social en un aula virtual

Presencia social en un aula virtual

Mario Rocha

La presencia social en un aula virtual, es una situación que se ha sido tema de discusión y polémica en los últimos tiempos, con el incremento de la educación con la modalidad virtual a distancia, en donde los alumnos y el educador se encuentran en diferentes regiones geográficas, y aún en países diferentes, ya que los cursos se desarrollan con el soporte de las TIC, utilizando herramientas tanto sincrónicas como asincrónicas, en donde el tutor ejerce el rol de mediador entre los contenidos, las actividades y de motivación, para que las actividades se cumplan en los plazos previstos en la agenda y realimentando adecuadamente los resultados de los procesos evaluativos.

Teniendo en cuenta esta situación, el aula de clase es virtual, es decir no existe la presencia simultánea de los alumnos ni el docente en dicha aula, por los tanto los encuentros cara a cara no serían factibles, sin un acuerdo previo de un determinado tiempo y utilizando alguna herramienta de tipo sincrónica, como por ejemplo la mensajería instantánea (chat), con la cual se puede interactuar con audio y video, iniciando un primer acercamiento a un encuentro virtual presencial, en donde es necesario establecer reglas y disponer de un moderador para que exista orden en las diferentes intervenciones.

Bajo estas circunstancias, este tipo de interacción permite que los diferentes actores de un curso puedan socializar la transferencia del conocimiento, de una manera más cálida que cuando se utilizan las herramientas de tipo asincrónico, en la cual cada uno participa en tiempos diferentes, sin tener en cuenta los diferentes estados de ánimo en que pueda encontrarse su interlocutor o interlocutores, sin saber exactamente en que tiempo va a obtener una respuesta a sus inquietudes, o si estas fueron interpretadas correctamente, de acuerdo con la intención de quién inició la comunicación.

De acuerdo con estos planteamientos, es posible tener una presencia social en las AVA (Aula virtual de aprendizaje), en la cual sería más apropiado hablar de una tele presencia, ausente de la calidez presencial, pero que considerada en forma práctica, y con las limitaciones correspondientes en tiempo y espacio, podemos considerar, que se puede aceptar como encuentros sociales cara a cara, los que se realizan en forma sincrónica utilizando la herramienta adecuada, con un determinado acuerdo de tiempo y duración, teniendo en cuenta que los diferentes participantes realizan actividades diferentes.

Estos encuentros socializadores virtuales, tienen sus limitaciones tecnológicas, y dependiendo de la cantidad de participantes, no sería práctico su realización, por ejemplo si organizaremos la realización de una video conferencia, se debe contar con una plataforma que soporte dicha aplicación, disponer de una ancho de banda adecuado y que los participantes tengan un equipo adecuado con acceso a internet que cumpla con algunas condiciones mínimas, de lo contrario, los efectos serían negativos y causarían desmotivación, teniendo en cuenta que todos desearían realizar sus aportes en este tipo de escenario.

Adicionalmente a unas reglas claras y una moderación eficaz, se presenta la limitación del número de participantes, ya que cada uno debe disponer de una tiempo adecuado, no es práctico realizar un gran número de intervenciones, porque el tiempo necesario sería demasiado largo, lo cual causa fatiga en los participantes, y una utilización desproporcionada de los recursos de la red, que aunque sean grandes, también tienen sus limitaciones, y adicionalmente hay que tener en cuenta la disponibilidad de las personas, que por razón de sus ocupaciones, también tendría limitaciones en el tiempo que podrían dedicar a este tipo de actividad.

Aunque tecnológicamente sea factible realizar encuentros cara a cara, hay limitaciones prácticas, que limitan la utilización de este importante recurso, que facilita la interacción de todos los participantes de un grupo, con el propósito de una mejor interacción basada en un mayor conocimiento de sus compañeros. Estas limitaciones pueden ocasionar que la implementación de este tipo de herramientas, solamente pueda realizarse en condiciones especiales tanto de soporte tecnológico, como de disponibilidad de los diversos actores involucrados en estos eventos de socialización

Se recomienda a los tutores, realizar actividades de socialización, utilizando herramientas de tipo sincrónico, en donde se efectúe un encuentro virtual presencial con sus alumnos, para incrementar la motivación y facilitar la apropiación del conocimiento como resultado de la socialización de los mismos, lo cual facilita su transferencia y  apropiación, teniendo como base un mejor conocimiento de sus compañeros y tutor, lo cual permite la eliminación de algunas barreras personales que dificultan la interacción de las personas, lo cual trae como consecuencia un mejor aprendizaje e incremento de la motivación de los participantes.